Dr. Luis Detinis
El rasgo de personalidad más destacado en
Silicea es la Timidez. Es el síntoma más frecuente (30% de los casos). Y
si el adulto no lo presenta en la actualidad, relata que fue muy tímido en su
infancia y adolescencia. Un profesor de 45 años decía: “timidez para hablar en
público a pesar de mis 20 años de docencia”. Es apocado. Puede tartamudear.
Teme hablar en público. Tiene sentimiento de vergüenza.
Es humilde, modesto y vergonzoso. Se agrava al
ser alabado. La madre de una niña de cuatro años Silicea decía: “cuando le
decimos: estamos orgullosos de vos, ella contesta: no me digas eso y se tapa
los oídos”.
Silicea es inseguro y esa inseguridad se
expresa en Trastornos por Anticipación ante cualquier situación de compromiso.
Sobretodo antes de un examen, presentando diarreas o sudoración abundante.
Es cobarde, no sabe ni puede defenderse, no
reacciona ante la agresión ni puede manejarla. Odia la violencia (sólo se enoja
consigo cuando una cosa no le sale bien en virtud de su perfeccionismo y
autoexigencia).
Silicea no tiene fuerzas, le falta vigor y
personalidad. Llega a los 20 años y aún no tiene firma. Le cuesta enfrentar el
mundo. El mundo le queda grande.
Dependiente. Modesto: un alto jefe de Segba
dice “soy empleado en Segba” (Servicios eléctricos). Resultó ser un alto jefe).
Cauteloso.
Es obtinado y perseverante. Sumamente
meticuloso, detallista, hasta la obsesividad. Minucioso. La letra es muy
pequeña, sobretodo la firma en relación al texto. Tiene inclinación por el
dibujo. El niño hace dibujos con todos los detalles. Puede ser desordenado pero
al mismo tiempo detallista.
Pasan los años y los juguetes se mantienen
nuevos (Tuberculinum los rompe). Hace modelismo, aviones o barcos en madera
balsa. Coleccionista.
El niño tiene buen carácter, es tranquilo, no
hace travesuras. No es agresivo. Es muy amable, sumiso, complaciente,
obediente, estudioso y mejor compañero o mejor alumno. Suele ser abanderado sin
ser competitivo. Es muy inteligente.
Es “familiero”, le gusta permanecer en su
hogar, es “casero”. Es humilde y sencillo.
Estadística sobre los 32 casos curados:
Timidez: 23 pacientes
Meticuloso y detallista: 17 pacientes
Dócil: 9 pacientes
Trastornos por anticipación: 8 pacientes
Cobarde: 7 pacientes
Limpio, muy pulcro: 7 pacientes
Obstinado: 6 pacientes
Hiper responsable: 5 pacientes
Cauteloso: 4 pacientes
Abanderado, mejor alumno: 4 pacientes
Temor de hablar en público: 4 pacientes
Sentimiento de minusvalía: 4 pacientes
Ofensa fácil, susceptible: 4 pacientes
Temor a la oscuridad: 4 pacientes
Dependiente: 3 pacientes
Traspiración ofensiva de pies: 10 pacientes
Muy friolento: 9 pacientes
Manchitas blancas en las uñas de los pies: 9
pacientes
Muy caluroso: 9 pacientes
Manos y pies fríos y sudados: 4 pacientes
Deseo muy marcado de dulces: 3 pacientes
Obstrucción del lagrimal: 3 pacientes
(curados)
Agregados
del Dr Luis Detinis al Repertorio
Llanto por admonición
Exceso de responsabilidad
Aversión a ser adulado o alabado.
Temor a estar solo
Timidez vergonzosa (se ruboriza)
Modestia
Tres síntomas casi patognomónicos de silicea,
que se presentan con poca frecuencia pero que son muy característicos son:
Temor a las puntas, inyecciones
Manchitas blancas en uñas de las manos
Sensación de pelo en la punta de la lengua
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